Magia y acción en Puentenansa
Al comenzar a leer esta entrada no podemos evitar pensar que el campamento está llegando a su fin, que en cuestión de horas el grupo estará de vuelta, las historias nos las contarán las protagonistas, de viva voz, y este blog volverá a quedar en silencio, hasta el año que viene.
Pero, como cualquier experiencia con fecha de fin, los últimos días se exprimen a fondo, y las actividades grupales se reactivaron, a la vuelta de los raids.
Al día siguiente de terminar los raids, como lo habían hecho tan bien, el bosque quiso recompensar a nuestros caminantes. En Cantabria son numerosos los seres que con su magia contribuyen a la belleza de la región, y agradecen mucho el paso de quienes cuidan y disfrutan la naturaleza. Por eso el bosque envió a sus mejores hadas, las Cuid-hadas, que mostraron al grupo cómo cuidarse y recomponerse, tras días de tanto esfuerzo. El masaje en grupo es un arte, y su técnica fue cuidadosamente transmitida por estos seres de luz.
Aquí podemos ver a las Cuid-Hadas, en su mágica aparición en mitad de la campa, y mostrando la técnica reconfortante (o eso creemos) a nuestras criaturas.

Esta escena de aquí arriba me recuerda más a un exorcismo, pero tampoco es que haya visto muchos, así que a lo mejor estoy confundiendo recuerdos...
Como veis, este arte de magia consiguió que entraran en un sueño profundo, del que despertaron horas después, habiendo olvidado los sinsabores y malestares del camino, y con el único recuerdo de haber disfrutado de un increíble y largo paseo por la naturaleza, en la mejor compañía. ¿No es poderosa esta magia del masaje grupal?
Y magia, lo que es magia, es lo que hicieron Faona y Oli en la cocina. ¿Con qué les recibieron al día siguiente, en el comedor? Pues ¡con un cocido!
Fue tal la magia del cocido, tan grande la recarga de energía, la sensación de plenitud, el fuego interior y la activación de poderes... que algunas personas se transformaron en la mejor versión de sí mismas, y a las pocas horas de regresar, ya estaban preparadas para el siguiente episodio.
Aquí vemos a este joven lobato, haciendo el saludo de la Manada y el de la banda de rock Kiss, al mismo tiempo. Yo quiero la receta de ese cocido, necesito esa "vibra"
Pero la magia tiene su fin, y hay que volver a la acción.
Y en este grupo, hay gente que necesita muuuuucha acción. Podríamos hablar incluso de acción extrema.
Para eso, para la acción, para el riesgo, para el deporte extremo y el desafío más loco, tenemos el día del Conquis, una actividad en la que todos y todas se organizan en grupos, y compiten en distintas pruebas, para lograr ganar el juego completo.
Este juego, basado en el programa "El Conquistador del Fin del Mundo" de la EITB, es muy significativo para el grupo, ya que uno de sus monitores, hace unos cuantos años, participó en el programa. Aquí tenéis más info, por si queréis saber de qué hablamos.
Os presentamos a los grupos que van a luchar por la primera posición.
Y a continuación os mostramos algunas de las pruebas. Vamos a intentar explicar las pruebas a partir de las imágenes que hemos conseguido. Perdonad si no sabemos muy bien cómo acabaron algunas. Lo mismo hay que hacer mañana alguna aclaración (o lo mismo a alguien mañana le toman declaración...)
Prueba 1: Encontrar algo en el fango. Si es que eso es solo fango. Se ve que la concentración era máxima, y creemos que la prueba exigía cierta sangre fría.
Prueba 2. Vemos imágenes de otra prueba en la que elaboran sus propios alimentos y los consumen. Al ampliar la imagen parece un pastel, o tartaleta. Pero también parece que lleva arena y ningún tipo de cocción... total ¿qué niño o niña no ha comido arena poco hecha alguna vez?
Prueba 3: A continuación, vemos esta prueba de talar troncos al estilo leñador, y cavar hoyos al estilo enterrador que es, claramente, una de las más difíciles.
Es la típica prueba que crees que la vas a hacer genial, que lo de talar troncos es facilísimo, que tienes un pariente en el pueblo que hace leña con una hacha, y sin protección ninguna, y que tú lo llevas en la sangre (igual que otras buenas costumbres de tus parientes).
Pero, ¡ay! qué dura es la realidad, qué dura es la madera, y qué filo más romo tiene esa hacha.
También crees que hacer un hoyo está chupao, que en las películas de misterio, en cuanto te descuidas, han cavado un hoyo y han guardado un secreto dentro (en el mejor de los casos).
En fin, advierto que ver estas imágenes puede resultar especialmente impactante para quienes sufran dolores de espalda.
Prueba 4: Por último, no podemos dejar de mencionar la prueba de trepar árboles. Que si Tarzán y Mowgli dicen que encima de un árbol se vive bien, y tal y como está el precio de la vivienda, este aprendizaje resulta fundamental para nuestras criaturas. Además, los trabajos en altura están cotizadísimos. Yo solo le veo ventajas a ganar esta prueba.
En resumen, dicen por ahí que la cuerda se trepó, y se usaron las manos y los pies. Y los dientes cuando hicieron falta.
La final definitiva de capitanes fue digna de ver, y de oír. A mí se me han puesto los pelos como escarpias, y creo que he dicho en voz alta cosas que no se pueden transcribir. Pero me vais a entender.
¿Queréis ver más pruebas y más vídeos?Aquí va un poquito de contenido adicional, solo para las familias realmente interesadas en conocer el progreso de sus hijos e hijas en el campamento. En estas imágenes comprobaréis que ha valido la pena el esfuerzo, y que ya son capaces de sobrevivir en cualquier situación.
Y aquí tenéis al grupo ganador del Conquis, que no pueden estar más orgullosos, y sorprendentemente limpios.
Nos despedimos hoy con un comunicado de última hora, junto a la imagen que se está difundiendo por todo Puentenansa a la mayor velocidad.
Ha regresado El Asesino de la Pinza, lleva munición, y esta vez parece que va en serio.
"Hay mucho para aprender.
Paciencia, movimiento, fuerza.
Es increíble todo
lo que soporta
un cuerpo"
Fragmento del poema "El instinto no existe" del libro Campamento de Supervivencia de Jimena Arnolfi Villarraza
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